En esta entrada del blog trataré el uso de rúbricas y otros instrumentos de evaluación para los diferentes tipos - inicial, formativa y final – pero centrándome en la formativa. Considero que este tema fue el más importante porque no estamos acostumbrados a evaluar. Fue muy útil la realización de una rúbrica y el poder establecer diferentes tipos de evaluaciones dentro de una actividad. Con estos breves ejercicios, hemos sido más conscientes de la importancia de darle a nuestro alumnado desde el principio toda la información necesaria para evolucionar, mejorar su nivel y superar las actividades que les vamos realizando.
Tras la presentación teórica sobre el uso de rúbricas de evaluación, utilizamos la actividad de mediación del documento Drive compartido para toda la clase y creamos una rúbrica para nuestra actividad. Como nuestro ejercicio contaba con dos partes - la creación de un CV y un role-play - evaluamos 3 criterios esenciales para la actividad y utilizamos una escala de calificación de 4 tramos que iba desde el insuficiente hasta el excelente. A continuación podéis echarle un vistazo:
Definimos una rúbrica como una serie de criterios coherente para el trabajo del alumnado; además, incluye descripciones de los niveles de calidad de actuación en esos criterios. Las rúbricas se utilizan para evaluar procesos y productos, pero son descriptivas: dentro de una rúbrica se empareja la actuación o producto con la descripción, no se emite un “juicio”. Las descripciones no deben ser cerradas o encorsetar las posibles respuestas. Si están bien diseñadas, las diferentes herramientas de evaluación que se pueden utilizar pasan de ser juicios sobre el aprendizaje a ser pruebas de un aprendizaje y deben mostrar los objetivos de aprendizaje. Las rúbricas pueden ser holísticas o analíticas y específicas o generales. Algunos de los errores en la construcción de rúbricas son el confundir la tarea con el objetivo del aprendizaje, mezclar destrezas distintas, integrar características externas, evaluar cosas que el alumnado no espera. Finalmente, no debemos confundir una rúbrica con un baremo de cantidad.
En nuestro caso, no nos resultó complicado crear la rúbrica puesto que es un instrumento bastante frecuente para la evaluación de actividades de producción oral. Una vez establecidos los criterios, fuimos escribiendo las descripciones; sin embargo, fue más cómodo empezar por las descripciones de “excelente” e “insuficiente” y luego modular esas descripciones según si debían ser calificadas como “suficiente” o como “bien”. Habíamos trabajado antes con rúbricas e, incluso, habíamos creado alguna para otras materias del máster, pero no nos habían dado unas directrices claras y correctas de cómo deberíamos haber definido los criterios o qué escala de calificación sería la más adecuada según esos criterios a evaluar. La creación de una rúbrica correcta no es un trabajo sencillo o que se realice en poco tiempo, pero con algo de práctica se puede lograr.
En nuestro caso, no nos resultó complicado crear la rúbrica puesto que es un instrumento bastante frecuente para la evaluación de actividades de producción oral. Una vez establecidos los criterios, fuimos escribiendo las descripciones; sin embargo, fue más cómodo empezar por las descripciones de “excelente” e “insuficiente” y luego modular esas descripciones según si debían ser calificadas como “suficiente” o como “bien”. Habíamos trabajado antes con rúbricas e, incluso, habíamos creado alguna para otras materias del máster, pero no nos habían dado unas directrices claras y correctas de cómo deberíamos haber definido los criterios o qué escala de calificación sería la más adecuada según esos criterios a evaluar. La creación de una rúbrica correcta no es un trabajo sencillo o que se realice en poco tiempo, pero con algo de práctica se puede lograr.
Durante la última sesión de este tema, abarcamos los diferentes tipos de evaluación y lo llevamos a la práctica utilizando nuevamente la actividad de mediación mencionada anteriormente. En nuestro ejercicio, consideramos que la evaluación formativa era la más adecuada, ya que monitoriza el aprendizaje del alumnado para proporcionar un feedback continuo que puede ser utilizado tanto por el profesorado - para mejorar la enseñanza - como por el alumnado - para mejorar su aprendizaje.
La evaluación formativa ayuda al alumnado a identificar sus puntos fuertes y débiles e a focalizarse en las áreas que necesitan más trabajo; además, ayudan al profesorado a reconocer las áreas donde los/as alumnos/as tienen más dificultades y poder abordarlas o tomar decisiones que favorezcan su progreso de aprendizaje. De esta manera, mediante la evaluación formativa, el alumnado sabe de dónde parte, cuál es su meta y qué debe hacer para llegar a ella. En nuestra actividad, el alumnado debe entregar su CV al profesor/a al final de la sesión para su corrección, que se hará mediante el uso de una checklist. Además, quedará constancia de los role-plays gracias a grabaciones de audio, que servirán de herramienta para la co-evaluación del alumnado. Tras la realización de la actividad, en la siguiente sesión se les entregarán nuevamente los CVs con comentarios del/la docente y las grabaciones de audio ayudarán a comprender cuáles han sido las destrezas y carencias de cada alumno/a y, así, mejorar para futuras actividades similares. A través de la co-evaluación, el alumnado no solo será evaluado sino también proporcionará una evaluación a los/as compañeros/as, implicándose de esta manera en la activida y haciendose responsable de su aprendizaje
La evaluación formativa ayuda al alumnado a identificar sus puntos fuertes y débiles e a focalizarse en las áreas que necesitan más trabajo; además, ayudan al profesorado a reconocer las áreas donde los/as alumnos/as tienen más dificultades y poder abordarlas o tomar decisiones que favorezcan su progreso de aprendizaje. De esta manera, mediante la evaluación formativa, el alumnado sabe de dónde parte, cuál es su meta y qué debe hacer para llegar a ella. En nuestra actividad, el alumnado debe entregar su CV al profesor/a al final de la sesión para su corrección, que se hará mediante el uso de una checklist. Además, quedará constancia de los role-plays gracias a grabaciones de audio, que servirán de herramienta para la co-evaluación del alumnado. Tras la realización de la actividad, en la siguiente sesión se les entregarán nuevamente los CVs con comentarios del/la docente y las grabaciones de audio ayudarán a comprender cuáles han sido las destrezas y carencias de cada alumno/a y, así, mejorar para futuras actividades similares. A través de la co-evaluación, el alumnado no solo será evaluado sino también proporcionará una evaluación a los/as compañeros/as, implicándose de esta manera en la activida y haciendose responsable de su aprendizaje
En definitiva, la práctica de estas breves actividades en grupo me han servido de gran ayuda para comprender la importancia de hacer partícipe al alumnado en el proceso de enseñanza-aprendizaje y también de la importancia de proporcionarle todas las herramientas necesarias para progresar. Puede parecer complicado en un primer momento la creación de rúbricas claras y apropiadas para la evaluación que queremos hacer, pero finalmente se consigue.
Bo día Uxía! Antes de nada darte os parabéns polo teu blog e a túa entrada. Creo que está moi ben organizado e deixa moi clara a túa postura a respecto de certos temas.
ResponderEliminarAo igual ca ti, este tema de avaliación pareceume dos máis importantes xa que non temos a penas coñecemento de como facelo de forma correcta. A rúbrica considero que é unha ferramenta moi útil para poñer en práctica os procesos cos que imos avaliar ao noso alumnado. Son instrumentos que permiten medir o progreso do estudantado e aplicable a calquera tipo de actividade, por iso, saber crear unha rúbrica e como utilizala é esencial para nós como futuros docentes. Tamén penso que a creación dunha rúbrica é fundamental para ser conscientes da complexidade que supón o proceso de elaboración da mesma, e para comezar así a familiarizarnos con este tipo de medios de traballo. Cando falas de avaliación formativa, de novo, concordo contigo no tocante á que é o método máis axeitado para o proceso Ensinanza-Aprendizaxe. É un método no que o alumnado é consciente das súas necesidades, ademais das súas fortalezas, o que lle permite autoavaliarse para reforzar as áreas nas que o precise, facilitando así o proceso de aprendizaxe. Grazas pola túa aportación e, de novo, parabéns!
Hola Uxía!ya que hemos trabajado juntas en el desarrollo de las actividades me parecía justo pasarme por tu blog y echar un ojo!en cuanto al tema de la evaluación y las rúbricas no puedo estar más que de acuerdo contigo sobre la importancia de la evaluación y el uso de instrumentos válidos dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje. Afirmas que en las primeras líneas del texto que todavía, como alumnos y futuros profesores, todavía no estamos acostumbrados ni a utilizar ni a crear rúbricas: estoy totalmente de acuerdo contigo.
ResponderEliminarEn efecto, al empezar el máster, la palabra rúbrica para mi era totalmente desconocida. No conseguía darle un significado ya que, viniendo de un sistema totalmente diferente, para mi la evaluación se llevaba a cabo más de forma sujetiva (sobre todo en la producción escrita) que de forma objetiva.
Descubrir la existencia de diferentes herramientas que nos permiten ser mucho más objetivos así como ofrecer la posibilidad al alumnado de que sea consciente de su progreso, me parece algo muy útil y sobre todo correcto.
La co-evaluación por ejemplo es algo que me sorprendió y que de primeras me asustó ya que llegúe a pensar: ¿hasta qué punto hay veridicidad en las respuestas de los alumnos? No obstante, el visionado del vídeo y la pequeña charla que hemos tenido en clase ha resultado clave para que cambiase de opinión acerca de la co-evaluación. Una vez visto como se lleva a la práctica, la considero una opción mucho más que viable y sobre todo necesaria para que los alumnos aprendan a madurar. Es hora de que demos el paso definitivo de la escuela tradicional a la nueva escuela, tratando de confiar más en los alumnos y motivándoles para que lleguen a ser personas con múltiples capacidades y conocimientos que les servirán para su vida futura.
Te mando un abrazo,
Sonia
¡Hola Uxía!
ResponderEliminarAntes de todo quería felicitarte por tu entrada, dado que me parece muy interesante e importante lo que dices.
Personalmente quería comentarte el uso de la evaluación formativa. En mi experiencia personal, como imagino también en la tuya, los profesores y las profesoras nos evaluaban solo con un examen, al final de una unidad didáctica o de un trimestre o del año, sumativo sobre lo aprendido, y si la nota resultaba ser negativa, lo único que hacían los docentes era simplemente decirnos en que nos habíamos equivocado, pero sin preocuparse si habíamos entendido el porque del error. Por eso la introducción de la evaluación formativa con sus componentes (rúbricas, autoevaluación, co-evaluación etc.) me parece fundamental para el alumnado y su aprendizaje porque gracias a ella los/las estudiantes se enteran de sus errores, malentendidos y faltas, y de esa manera pueden trabajar en ello; además, a los profesores nos permite observar a los alumnos alumnas y ayudarles en su formación. De la misma forma, me parece crucial introducir, utilizar y dar importancia a la evaluación formativa desde los primeros años de escuela del alumnado. Si aprenden desde pequeños a autoevaluarse y a co-evaluar al resto de compañeros, significa que entienden dónde están los errores y los fallos en su aprendizaje y en el de sus compañeros/as. Eso se hace fundamental porque pueden identificar y llenar las carencias de su aprendizaje, y personalmente creo que, con el tiempo, esto llega a ser útil también en sus vidas fuera del contexto escolar.
Como se suele decir “de los errores se aprende”, pero claro, eso ocurre solo si se entiende como, cuando y porque cometimos el error. Si no somos capaces de identificarlo, tampoco somos capaces de mejorar y seguir adelante.
Una vez más, enhorabuena por tu entrada y gracias por tus aportaciones.
¡Un saludo!
Hola Uxía:
ResponderEliminarFelicitaciones por tu entrada, me ha parecido realmente interesante.
Personalmente, a mí también me han servido de gran ayuda las actividades realizadas en el aula. Las rúbricas me parecen una buena herramienta de evaluación. Además, es una forma de evaluar objetiva.
En cuanto a los tipos de evaluación, la evaluación formativa me parece las más interesante, ya que permite al alumnado mejorar de manera progresiva y alcanzar los objetivos deseados por nuestra parte. Para ello, también es importante que nosotras como docentes seamos claras y les expliquemos a los estudiantes qué es lo que realmente queremos y cuales son los fines académicos que queremos que consigan.
Te mando un fuerte abrazo.
Rocío Pumares Covelo